Hoy nos toca descubrir a uno de los animales más antiguos de la tierra. Escurridiza y de aspecto poco "agraciado", la lamprea llama la atención por su textura viscosa, su longitud y su boca redonda con dos filas de dientes concéntricos y una lengüecilla. A modo de comentario curioso, diremos que puede llegar a matar una ballena mediante succión y que se trata de una animal prehistórico que no ha evolucionado practicamente nada, conserva las características más primitivas de los primeros invertebrados y eso es una de las cosas que la hace más especial. Una de sus particularidades es su proceso vital. Nacen en los ríos, cuando alcanza los 20 centímetros descienden hasta el mar y en su momento de plenitud y madurez sexual ascienden otra vez por los ríos para desovar, muriendo después de conseguirlo. Su instinto reproductor le trae de regreso a los cauces fluviales y es en este momento cuando se procede a su captura. En Galicia, y más en concreto en el Baixo Miño (Crecente, Arbo, As Neves y Salvaterra) y en el Río Ulla se pesca de una forma única y singular, usando unas estructuras pétreas que tienen como objetivo la colocación de las artes de pesca (de origen medieval) llamadas Pesqueiras. En nuestro paseo matutino de hoy nos hemos adentrado en las Pesqueiras de Sela, punto de inicio perfecto para entender el oficio y la tradición , ya que existe una zona interpretativa y comienza una ruta de 9km (La ruta de los pescadores) donde se pueden divisar e incluso tocar muchas de ellas. Su presencia nos hace ser conscientes de la importancia y el peso económico del producto en estos territorios, sobre todo cuando vemos que en tan sólo 25 Km nos podríamos llegar a encontrar con 1 cada 35 metros. Hoy en día muchas han sido abandonadas encontrándose en activo unas 120.